Adrián Paenza es licenciado y doctor en ciencias matemáticas egresado de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires y periodista deportivo.
Es un «maestro» en mostrar desarrollos científicos por medio de acertijos y cuentos para pensar. Este es uno de ellos.
Ojos Celestes en la Isla
La vida cotidiana nos pone ante situaciones en donde hay que decidir. Decidir rápido, decidir racionalmente, decidir con pasión, decidir pensando en el futuro, decidir sobre si tener un hijo, si casarnos, si comprar este departamento, si seguir esta carrera. Podría seguir, obviamente, pero estoy seguro de que la lista suya tomaría por distintas direcciones. El hecho es que uno está constantemente expuesto a decidir.
Pero para tomar decisiones elaboradas, educadas, racionales, hace falta tener datos. Y, si fuera posible, la mayor cantidad de datos. Hasta para patear un penal hacen falta datos. ¿Qué sabe mi interlocutor sobre mí que yo no sé que él sabe? ¿Qué sé yo sobre él que él no sabe que yo sé? ¿Cómo usar esa información en beneficio propio?
La matemática, aunque no parezca, ofrece herramientas para tratar estos temas. No son infalibles ni categóricas (en general), pero le dan claramente una ventaja al “otro” si él las tiene y yo no. Y ni hablar si yo las conozco y ese “otro” no.